En esta nueva entrada del Blog vamos a hablar sobre como influye el CORE en la estabilidad de nuestra columna, pelvis e extremidades inferiores.
Para empezar vamos a explicar lo que es el CORE: el CORE es el área que comprende toda la región abdominal, lumbar y pélvico. Es el Centro de gravedad de nuestro cuerpo.
El CORE está compuesto por los músculos recto abdominal, cuadrado lumbar, psoas mayor, oblicuo interno, oblicuo interno, gluteo medio y recto abdominal (son mucho más los músculos que componen el CORE pero estos son los principales).
Si contamos con un CORE deficiente nos pasará cómo en la terecera imagen (empezando por la izquierda). La pelvis basculará en exceso y el vector de fuerza producido (linea amarilla) no será el correcto provocando un desequilibrio tanto en la pierna en apoyo (rodilla, tobillo), como en la pelvis y en la columna, ya que al girar la pelvis en exceso la columna se rotará (siendo muy perjudicial para nuetras vertebras) apareciendo escoliosis, acortamientos, hernias discales etc….) Por supuesto con el paso del tiempo, por lo que hay suficiente tiempo para atajar este problema.
Foto: Journal of Biomechanics
En los deportemos que más tratamos (running y ciclismo) influye de la siguiente manera:
– Running: amplio grado de valgo (rodilla que rota hacia dentro) o varo (rodilla que rota hacia afuera)
Rotación excesiva de la columna. Como podemos ver en esta imagen al «bajar» la pelvis tras el apoyo la columna se gira hacia la izquierda, provocando que las piernas se junten practicamente (amplio grado de valgo)
– Ciclismo: mala posición sobre el sillín debido a la falta de fuerza en el CORE provocando que la cadera se desplace en exceso, con la consiguiente sobrecarga de un lado sobre el otro.
Espero que os haya gustado este pequeña aportación.
Gracias!!