En honor a aquel mítico programa, que recordaran aquellos que superen la treintena, en el que se confirmaban o desmentían mitos de todo tipo desde un punto de vista científico, hoy os traemos un post sobre los mitos en la posición del ciclista, en el que intentaremos desmentir o confirmar algunos de las creencias más populares entre los ciclistas que conocen algo o se han informado sobre la biomecánica del ciclismo.

  • Altura del sillín: formula de la entrepierna o del talón. Quien no ha utilizado alguna vez la formula de la medición de la entrepierna multiplicándola por 0,885 para poner la altura del sillín. Estos dos métodos nos sirven para tener una aproximación a la altura del sillín, pero no tiene en cuenta aspectos tan importante como la posición de la cala, longitud del pie, características físicas y morfológicas etc… de cada ciclista. Desde mi experiencia y tras más de 11 años en el mundillo, esta formula puede provocar un sillín 2cm alto o 2cm más bajo de lo que se debe.
  • Movimiento sobre el sillín: “cuando te mueves mucho sobre el sillín es que vas alto”. Esto no es del todo cierto, aunque tampoco es incorrecto 100%. Es verdad que si el sillín está muy alto al ciclista le costará mantener una posición más estable sobre el sillín, pero la estabilidad sobre el sillín es algo más complicado. Esto va a depender de la forma del sillín, fuerza en los músculos de la cadera, avance y retroceso del sillín, longitud de bielas, diferencia entre sillín y manillar etc…
  • Se debe pedalear bajando el talón y tirando del pedal hacia atrás (pedaleo redondo). Como vimos en el artículo sobre el pedaleo, si tiramos del pedal hacia atrás, aparte de involucrar más a la musculatura isquiosural, estaremos generando un mayor impulso negativo (torque negativo). Al igual que si bajamos el talón en exceso durante la fase donde tenemos que aplicar la máxima fuerza, no involucraremos más a los isquios pero sí estaremos generando un mayor torque negativo (impulso negativo) ya que estaremos rompiendo la inercia del pedaleo.
  • Mito de la longitud de biela: cuanto más larga más fuerza ejerzo. La longitud de la biela es un aspecto muy importante en la posición sobre la bicicleta. Una biela más larga requiere de una mayor flexión de rodilla y cadera, con lo cual si no disponemos de ese rango de movimiento en nuestras articulaciones no estará perjudicando tanto la posición como la producción de potencia. No nos debemos olvidar que la potencia es igual a la fuerza (par) que se ejerce x la velocidad (cadencia) con lo cual si la biela es demasiado larga estaremos perjudicando la producción de cadencia, ya que ejercemos más fuerza, pero no somos capaces de llevar una cadencia más alta.
Diferencias a nivel cinemático entre bielas de distinto tamaño. Podemos ver que conforme la biela va siendo más pequeña el ángulo de la cadera se va abriendo.
  • La plomada: este método, el cual tiene ya unos cuantos años, se utilizaba y utiliza para colocar el sillín en cuanto avance y retroceso y digo que se sigue utilizando porque en las redes y en internet hay cientos de vídeos en los que aún se recomienda este método para el ajuste del avance y retroceso del sillín. Para quien no lo conozca, consiste en sobre el borde de la rodilla lanza un hilo y cuando este se quede recto debe quedar en el centro del eje del pedal.

¿Por qué no es correcto?

Entre otras cosas no tiene en cuenta a la reina de la posición del ciclista: la PElVIS, esta nos va a condicionar desde el avance y retroceso del sillín, altura del manillar… y hasta incluso las calas si tenemos alguna asimetría en la cadera. Entonces…. Una pelvis muy vertical por ejemplo nos obligará a llevar más adelante ya que si no nos costará llegar al manillar. La mejor de forma de ajustar el sillín en cuanto retroceso es la más simple a la vez más complicada: la posición en la que la pelvis tengo un mejor apoyo y estabilidad.

  • Si estoy entre dos tallas, mejor la pequeña. Esta es otras de las profundas creencias populares que hay entre ciclistas, pero que con la entrada de las nuevas geometrías, esto cambia totalmente. De hecho ahora mismo para un ciclista/ cicloturista le recomendaría lo contrario (dependiendo de que geometría) ya que en algunas marcas la diferencia entre dos tallas radica en la altura del cuadro. Con un cuadro más alto siempre iremos en una posición más relajada en la que no tendremos que flexionar tanto la cadera para llegar al manillar. Ahora bien, si tus capacidades son muy buenas, tienes buen nivel y quieres una bici más reactiva y “juguetona” entonces quizás y solo quizás deberías coger la talla pequeña, pero incluso esto está tendencia está cambiando entre los profesionales. Si os fijáis en corredores de la talla de Van der Poel o Pogacar podemos ver que ya no llevar esas diferencias entre sillín y manillar tan grandes como llevaban antes. En definitiva no hagas caso a las marcas que solo se basan en la entrepierna y tu altura, puedes estar cometiendo un error en la talla.
Dos tallas distintas, con un mismo Reach (alcance del cuadro) pero distinto Stack (altura del cuadro)

CONCLUSIÓN

Trata de no imitar las posiciones de los profesiones, salvo que tengas las mismas cualidades y  deja que un profesional cualificado te ayude con la posición.

Nuestra posición no es eterna y puede ir cambiando con los años e incluso dentro de un mismo año, si nuestro estado de forma, niveles de fuerza etc… cambian.